La otra mirada

Diálogo entre culturas, de lo local a lo global.

Distopías juveniles

En los últimos años la ficción distópica se ha popularizado mucho entre diferentes públicos, también en el adolescente o juvenil. Series de libros y películas como Los juegos del hambre (2008) de Suzanne Collins están conectando con una generación joven que se enfrenta a un mundo en apariencia ideal, pero que oculta la destrucción de la civilización y su destrucción deshumanizada. Normalmente las distopías representan las fallas de nuestros sistemas sociales. Por supuesto, este género no nace de la nada, y se relaciona con las ideas filosóficas y políticas sobre la organización social del ser humano. Hay además una tradición literaria, dirigida sobre todo al público adulto, y especialmente anglosajona. En este video pueden verse algunas características de los universos distópicos y la literatura que los ha creado y descrito.

 

Odio el rosa (2014) de Ana Alonso y Javier Pelegrín, es una serie de novelas en español que presenta una sociedad distópica ambientada en 2055 con personajes jóvenes que buscan descubrir su identidad en un mundo donde la marca es todo. Se crea un gran conflicto entre la necesidad de crear una identidad individual propia y las expectativas que tienen las marcas corporativas para la que Sara, una de sus principales protagonistas en la saga, trabaja. Os dejo un booktrailer del primer libro creado por una lectora para que lo véais.

Y también una entrevista con la autora, que nos explica cómo relacionan esta saga futurista con nuestro presente, y explica cómo han creado la saga utilizando no solo los libros, sino también otros medios tecnológicos como una web, etc. Con estas técnicas, han creado una narrativa transmedia, donde puedes explorar diferentes aspectos de la historia en diversos lugares y formatos.

 

¿Conoces otras novelas o ficciones distópicas? ¿Ves algunos rasgos del video sobre la distopía reflejados en Odio el rosa y en otras ficciones distópicas?

120 comentarios el “Distopías juveniles

  1. Ellen
    30/04/2017

    La novela “Odio el Rosa” me recuerda mucho a la novela del George Orwell “1984”. Las dos novelas intentan aumentar la conciencia entre sus lectores, criticando la sociedad contemporánea a través de distopías sobre sociedades en un futuro no demasiado lejano. Las sociedades descritas en las novelas funcionan ambas como dictaduras, donde los ciudadanos están divididos por clases y donde existe una elite muy poderosa. Ambas novelas describen una sociedad que manipula la información e intenta controlar los pensamientos y los sentimientos de los ciudadanos. La opresión del individualismo es casi total. Tampoco existen los naciones o países como nos conocemos hoy. Mientras “1984” fue una advertencia del totalitarismo después la segunda guerra mundial, el nazismo y el estalinismo, la novela “odio la rosa” es más bien una advertencia del poder del comercialismo y las marcas multinacionales. Los protagonistas Zara y Winston (1984) empieza a rebelarse contra el sistema y se pone en contacto con otros rebeldes.

    • Lilian Nora Kjos-Pötsch
      01/05/2017

      Tus palabras me hacen pensar en un libro, que leeí hace un poco de tiempo. Se llama «Divergente», escrito por Veronico Roth. Como has dicho el libro «Odio el rosa» parece a una dictadura. El libro al que me refiero tiene mucha similtud con lo que dices. Se trata de una sociedad futurista, que se devide en cinco facciones. El resto se llaman los abandonados y no tienen ni estatús ni un privilegio en la sociedad. El gobierno que existe controla a toda la gente y eso parece mucho a tus pensamientos.

    • Idun
      01/05/2017

      Has hecho comparaciones muy interesantes. Las dos novelas dicen algo sobre el sistema social, o mejor dicho los fallos del sistema. El hermano mayor, el que vigila todo, es muy presente en 1984 y Odio el rosa. Sweet Pink tiene mucho poder, y es fácil entender que la marca tiene mucha información sobre sus representantes.

    • Emma
      12/05/2017

      Creo que has señalado lo más interesante de estas distopías y es que aunque las sociedades en los libros/las películas aparecen muy lejas de nuestro mundo, a menudo representan una crítica hacia exactamente nuestra sociedad. En los libros encontramos mundos con características distintas de nuestra sociedad, pero cuando analizamos más profundamente podemos encontrar características más similares también. Eso es lo que hicimos en la clase con «Odio el rosa».

    • Mari
      12/05/2017

      La novela de Orwell fue la primera distopía en la que pensaba yo también, cuando leía ”Odio el Rosa”. Tus observaciones son muy buenas, y me interesa mucho la comparizacion que haces sobre las advertencias que hacen los dos libros. Esto illustra muy bien que lo que es una distopía tal vez cambia un poco en diferentes tiempos. Se puede decir que Orwell critica, entre muchas cosas, la pobreza como consecuencia de guerra. Por ejemplo, recuerdo que en el libro siempre faltaban cosas esenciales, como por ejemplo ojas de afeitar, y que había muchas cosas como café y vino que la gente no podía conseguir en absoluto. En ”Odio el Rosa”, sin embargo, me parece que Ana Alonso está criticando también la vida materialista y superficial, y la abundencia de lujo y tecnología que hay en Sweet Pink. Además, ambos libros, como distopías futurísticas, hablan de la nostalgía a un pasado mejor – representada por los blogs clandestino en ”Odio el Rosa” y los viejos objetos bonitos que compra el protagonista en la tienda de antiguedades en «1984».

    • Monika
      12/05/2017

      Muy bien analizado Ellen. Me gusta como muestras como la literatura de ficción refleja los problemas actuales. Hoy en día el problema es que el materialismo domina nuestra sociadad. Me interesa de que van a escribir los autores en la segunda mitad del siglo. ¿Qué pensais?

    • Tonje F.
      14/05/2017

      Es interesante que todo el tema de «Big brother sees you» ha acabado como un concepto utilizado para la industria del entretenimiento, es decir en los «reality shows». Creo que en las primeras temporadas de Big Brother había cierta discusión sobre el tema del monitoreo, y el impacto del show consistía en el pleno hecho de monitorear un grupo de gente 24/7. Pero en los últimos años todo el mundo ya no discutía eso, y todo el «proyecto» se convirtió en ver hasta qué punto estában dispuestos los participantes para hacer cosas escandalosas.

    • wiscko
      14/05/2017

      ¿Pero tú no reconoces que todo lo que dices son elementos de nuestra propia sociedad ahora mismo? Me parece que los autores de literatura distópica solo aumentan y enfatizan elemetos de nustra propia sociedad para crear un imagen más identificablemente opresivo.
      Somos todos divididos por clases y hay un elite en cada sociedad, aunque no lo reconocemos porque no es tan obvio.
      El gobierno, las organisaciones, las marcas y los periódicos pueden controlar y manipular la información que recibimos; lo vez muy claro si lees dos artículos sobre el mismo evento de dos periódicos de distintos países. Esto en turno resulta en control de los pensamientos y sentimientos de los ciudadanos; cómo vestirse, hablar, comportarse, congeniar, etc. El poder del comercialismo y las marcas multinacionales es increíble ya.
      La discussion más popular en Facebook en Noruega ahora mismo es «¿Es okay agitar una bandera de otro país el 17. Mayo?» – y es la discussion más popular solamente porque fue publicado por Dagbladet con el ánimo «dí tu opionion en el sección de commentarios.»  Con esto está todo dicho.
      La única diferencia de nuestra sociedad y las sociedades en las ficciones distópicas, es la opresión del individualismo. El individualismo es nuesta única salvación contra la opresión, y por esto está usado como la amenaza de una sociedad apagado.

  2. Lilian Nora Kjos-Pötsch
    01/05/2017

    La novela ”Odio el rosa”, que leímos en clase, me hace memoria a la trilogía de los juegos del hambre, escrito por Suzanne Collins. Las dos son novelas para jóvenes y son de ciencia ficción y aventura. Además se llevan a cabo en un período de tiempo futuro, aunque el tiempo de los juegos del hambre no se devuelve un tiempo indentificable.
    La marca grande Sweet Pink con sus distritos, que la rodean, me parece mucho a los juegos del hambre. Ahí encontramos un rico Capitolio que está rodeada por doce distritos. Estos distritos son obligado de trabajar por el Capitolio para recibir alimentos y para poder vivir en este mundo.
    Además las personajes principales se reflejan una a otra. Las dos son chicas jóvenes, que vienen de un distrito muy pobre. Las dos quieren apoyar a su familia y entonces hacen cosas, que no les gustan. Sara se pone en una marca, que odia y Katniss se ofrece voluntaria para los juegos ocupando el lugar de su hermana menor.
    La jefa, Juliette, parece mucho al presidente Snow del Capitolio. Los dos son imprevisibles y tienen mucho poder. Son verdaderamente los enemigos de las dos chicas.
    Lo que hacen cuando rebelan es muy similar también. Sara rebela contra Sweet Pink cuando descubre unos asuntos horribles de la compañía. Una cosa parecida pasa con Katniss, que decide rebelar y unir los distritos contra el Capitolio y luego asesinar al presidente Snow.
    Concluyendo tenemos dos libros de ficciones distópicas, que se parecen mucho uno al orto.
    Son libros dónde la trama se desarrola en un juego peligroso en un mundo del futuro, que está gobernado por las marcas en la una, y el Capitolio en la otra narración.

    • Idun
      01/05/2017

      Odio el rosa y Los juegos del hambre se parecen mucho. Las dos chicas tienen, como has dicho, dos enemigos. Las relaciones familiares se parecen también. Sara y Katniss tienen hermanas menores, y las dos sienten una gran responsabilidad por el bienestar de ellas.

      • Emma
        12/05/2017

        Me gusta que me pueden hablar sobre «juegos del hambre», porque yo no he leído los libros, ni he visto las películas, pero de todos modos tengo mi propia impresión y es que es una historia de tonterías(pues, no me gusta mucho el género fantasía..). Pero como han comentado, hay un mensaje más profundo en el libro, que sin duda es interesante e importante, porque en una manera nos enseña algo de nuestra sociedad.

    • Ellen
      03/05/2017

      Estoy de acuerdo contigo, las novelas se parecen en muchos aspectos. Pero también hay diferencias muy claras. Lo más evidente es la violencia en los juegos de hambre. Esto parece mucho a los juegos de gladiadores en la época romana. En la novela odio la rosa, la gente es cínica, pero “civilizada”, su “violencia” está presente en otro nivel. En odio el rosa la crítica de la sociedad contemporánea es más presente. Sobre todo la crítica del poder de las marcas multinacionales y el riesgo de la tecnología.

      • Siw Helene
        11/05/2017

        También pienso en la relación entre Sara y Luke, y Katniss y Peeta. Aunque no es todo lo mismo. Sara y Luke son de dos familias diferentes, y aunque a lo mejor tienen muchos de los mismos pensamientos sobre como está funcionando Sweet Pink estan forzados de luchar por lo que su familia o propia sociedad quieren o neseciten. En los juegos de hambre Katniss y Peeta tambien terminan en una posicion en los juegos en donde, aunque les gustan, tienen que luchar y matar a la otra persona.

      • wiscko
        14/05/2017

        No estoy de acuerdo contigo Ellen.
        Yo diría que la crítica de la sociedad contemporánea es más presente en los juegos de hambre, porque las diferencias entre los districtos pobres sin tecnología moderna, y los districtos ricos con tecnología magnífica son más prominentes en esta serie contra Odio el Rosa.
        También, ¿No dirías que los riesgos de la tecnología están presentadas muy sencillo con los efectos del arena de los juegos del hambre y con las mutaciones que pueden crear con tecnología y distribuir en el mundo real para matar a los chicos?

      • Burim
        15/05/2017

        Estoy de acuerdo con Ellen que la película “Los juegos de hambre” trata más una guerra gladiatoria. Mientras que el Odio el Rosa trata un cinismo de las marcas grandes para conseguir un poder máximo sobre las otras marcas.

    • Karen Sofie
      12/05/2017

      Los juegos del hambre y Odio el rosa tiene mucho en común. Pensé en eso cuando estuve leyendo Odio el rosa. Especialmente porque las dos historias tienen distritos, y algunos distritos son mejores que otros. La gran diferencia es que Odio el rosa es sobre ropa y maquillaje cuando los juegos del hambre es sobre matarse unos a otros.

    • Embla
      12/05/2017

      Yo también estoy de acuerdo contigo. Pienso que “Odio el rosa” y “Los juegos de hambre” se parecen mucho. Las dos tratan del mundo en el futuro y las protagonistas son dos chicas que quieren cambiar la sociedad. Las sociedades donde viven están muy dividas, entre la gente pobre y la gente rica y privilegiada. Una similitud de ambas novelas es que la marca Sweet Pink en “Odio el rosa” y el Capitolio en “Los juegos del hambre” explotan a los niños. Sweet Pink usan los niños en trabajo infantil en la producción de ropa y joyas (para el consumo), mientras el Capitolio cada año usan 24 niños de los 12 distritos, como participantes en los brutales Juegos de hambre, sólo para el entretenimiento del Capitolio. Sara y Katniss quieren cambiar esto.

      • Andrea
        13/05/2017

        Estoy de acuerdo con vosotros. Odio el rosa y Los juegos del hambre se parecen mucho. En las dos novelas se trata de una chica que intenta cambiar la sociedad y que son las protagonista de la historia. En Odio el rosa, Sara, la protagonista, tiene cualidades que la hace importante para la marca Sweet Pink. En Los juegos del hambre, Katniss es la protagonista que tiene que participar en los juegos. Y como ya habéis mencionado, intenta cambiar la sociedad, por todas las injusticias que hay en los distritos.

    • Aurora
      14/05/2017

      Me parece divertido que Odio el Rosa es tan glamoroso, cuando Los juegos de hambre, en contrario, es bastante brutal. Por supuesto, tener un chip en tu cuerpo y ser controlado por marcas es brutal también en su manera, pero como expresan esa brutalidad me parece interesante. Los juegos de hambre tiene sangre, se matan, si eres pobre te obligan «vender» más tickets de tus hijos, algo que suben las posibilidades que tus hijos sean elegidos a participar. Como me acuerdo de Odio el Rosa, es casi lo mismo – si no tienes plata, estás «obligado» a convencer tu hijo que entre a una marca. Ambos se trata sobre una sociedad sin libertad, donde el gobierno te controla.

      • Tonje F.
        14/05/2017

        Yo pienso que el problema de Odio el Rosa es que en esa sociedad no hay gobierno en el sentido «gobierno legítimo», sino que son las marcas las que gobiernan y controlan al pueblo. ¡Qué horror vivir en una sociedad así!

      • Mathilde Engen Hammer
        15/05/2017

        Estoy de acuerdo contigo Aurora. Los juegos de hambre es muy brutal y parece más como las luchas gladiadores. El «Odio el rosa» es más como una critica de la sociedad y la importancia del belleza y las marcas. Hay similitudes como muchos han escrito, pero yo pienso que hay. Yo pienso que aunque los dos son novelas distópicas, tienen más diferencias que similitudes. El similitud más claro es que los dos tienen sistemas que obliga la gente a vivir en una manera especial y estricto.

    • Anna
      14/05/2017

      Las similitudes entre «Odio el rosa» y «Los juegos del hambre» son muy interesantes porque los dos universos nos contamos de una sociedad rota. El sistema, sea controlado de las marcas o de un gobierno violento, explotan, destruyen y crean una sociedad en donde es peligroso querer y pensar en algo diferente a lo normal (y aceptado).

    • Bendik
      14/05/2017

      Los personajes de Katniss y de Sara son muy parecidos en lo que quieren también. Ninguna de los dos pueden aceptar los circunstancias. Es como no pueden controlar sus ganas de rebellion. Por ejemplo, Katniss, en el libro dos, cuando ella y Peta visitan los distritos diferentes, ella no hace como la capital y todos han dicho pero elija sus palabras propias que resulta en un acto de rebellion en el distrito. La vida de Sara seria más fácil si solo haga lo que Juliette le pide, pero no puede aceptar las surcunstancias.
      Las dos son forzadas de rebelar, aunque es peligroso para ellos. Tienen un moral grande.

    • Ruth
      15/05/2017

      Creo que los libros de los juegos del hambre son los únicos libros distópicos que me gustan. La gente de Panem está oprimido, pero rebelan contra el capitol. Hay esperanza en la serie, y al final los buenos ganaron contra el capitol.

  3. Idun
    01/05/2017

    Una novela de ficción distópica que me ha gustado mucho es “Nunca me abandones” (Never let me go) escrito por Kazuo Ishiguro. Kathy, Ruth y Tommy son alumnos en Hailsham, un colegio Inglés. Pero Hailsham no es un colegio normal, los alumnos son clones y donantes. En Odio el rosa las marcas utilizan niños en sus fábricas para hacer ropa barata y para satisfacer los compradores. En Nunca me abandones los niños viven porque otras personas necesitan órganos. En los dos libros los escritores están criticando la sociedad donde algunos se aprovechan de otros, y que hay gente que vive sólo para satisfacer a otra.

    • Lilian Nora Kjos-Pötsch
      11/05/2017

      Es muy interesante que dices. Nunca he leído esa novela, pero cuando explicas la trama, me hace ganas de leerla. Me gusta la comparación que haces, que los dos libros tratan del aprovecho de los «jefes» de sus inferiores. Creo lo mismo y es muy importante tener en cuenta que esto realmente puede ocurrir en el futuro. Me da miedo que esto puede ser nuestro futuro y eso es algo todos tienen que tener en cuenta.

    • Anna
      14/05/2017

      Es muy importante hacer críticas de la sociedad para que la gente sepan que la posibilidad de algo como esto puede pasar es real. Ya está pasando en nuestra sociedad ahora con la producción de ropa y tecnología barato en los países más pobres en el mundo. Estas personas, como en el ejemplo de Idun, sólo viven para satisfacer los compradores y no tienen una vida propia.

    • Stina
      14/05/2017

      También hay una adaptación de película que vi hace muchos años. Después de verla, pensé como tú: que se trata de una crítica a la sociedad donde algunos personas se aprovechan de otras personas que no son tan privilegiado. Aunque no estamos imprudentemente cosechando órganos de personas creadas para ese único propósito, hay algunas tendencias similares en el mundo de hoy. A menudo me sorprende ver hasta qué punto algunas personas irán para poder mejorar sus propias vidas, a pesar de que significa arruinar a la vida de otras personas en el proceso.

    • Silje V.
      14/05/2017

      No he leído «Un mundo feliz» pero suena como un libro muy interesante. Estoy de acuerdo en que una dictadura con este tipo de manipulación puede ser tan mala como una dictadura con violencia y fuerza. Con violencia, al menos la represión es visible, pero con manipulación, las personas que viven en la sociedad podrían no darse cuenta de que están oprimidas.

    • wiscko
      14/05/2017

      ¿Pero esto es un poco hipócrita no? Aprovecharse es el curso natural del mundo; los herbívoros aprovechan del vegetación, los carnívoros aprovechan de los herbívoros y todos aprovechan del ambiente. No se puede sobrevivir sin aprovechar.
      Pero, no es natural ni perdonable que algunos aprovechan de otros en forma de opresar y usar otros por causa de codicia, cómo hacemos los seres humanos. Solo quiero señalar que aprovecharse no es malo, pero la forma cómo lo hacemos no está bien.
      Se puede argumentar que hemos parado de evolucionar cómo especie, porque en vez de evolucionar como especie, hemos evolucionado y cambiado nuestro ambiente, y por esto estamos aprovechandonos de mala forma.

    • Burim
      15/05/2017

      Parece una novela interesante, y al mismo tiempo es algo real. Hay niños en países que están utilizando para trabajar en fábricas donde producen ropas baratas. También sabemos que se roban los niños para sacar sus órganos y vender en marcados negros. Todo esto está pasando mientras que nosotros estamos escribiendo en el blog.

    • Ruth
      15/05/2017

      No he leído la novela, pero he visto la película “Never let me go”. Era muy triste, y me sorprendí mucho. La idea de “producir” personas para dar sus órganos a otras personas es muy brutal y difícil de imaginar.

  4. Jan
    02/05/2017

    Hace unos años vi la película «The Road» en la que interpreta el danés Viggo Mortensen (que vivió una parte de su infancia en Argentina y también ha interpretado papeles en español). La película está basada en un libro con el mismo nombre, y pertenece al género distópico apocalíptico, o sea, el argumento ocurre en un tiempo después de una catástrofe en la cual la sociedad moderna como la conocemos ha sido destrozada. En «The Road» la comunidad humana se ha convertido en una selva donde las bestias mandan y donde los que logran mantener unas normas más o menos civilizadas tienen que evitar manadas de canibales y otros peligros.

    «Odio el rosa» es otro tipo de distopía, que comparte rasgos con las obras más destacadas del género, como «1984» de George Orwell que ha mencionado Ellen, en la que se está criticando el desarrollo de la sociedad actual, o bien por el posible abuso de avances tecnológicos o bien por la pérdida del control político en favor del mercado libre. «Odio el rosa» trata de las dos cosas a la vez. Es fácil verlo como una crítica contra la situación económica actual, en la que las empresas multinacionales van ganando terreno, aprovechando los datos que sacan sobre tí, de modo que se crea una relación estrecha entre nosotros los consumidores y las grandes empresas, como explica la autora Ana Alonso en el video. Luego hay que tener en cuenta que no todos los elementos de «Odio el Rosa» son futuristas, que hay paises poderosos que mantiene ya un control estricto sobre el internet en su territorio, por ejemplo.

    • Emma
      14/05/2017

      Me interesan los abusos de tecnología que vemos en Odio el rosa también. Pero me preocupa si los jóvenes que leen el libro realmente pueden ver que la tecnología puede representar un reto serio de la sociedad hoy. Esta preocupación tengo porque en el libro mucha de la tecnología aparece muy “cool”, y puede ser que los jóvenes no ven el problema, sino que quieren vivir en un mundo donde hay tecnología como esa. A la vez, puede ser que yo subestimo los jóvenes hoy en día.

      • Tonje F.
        14/05/2017

        No sé si los subestimas, pero yo creo que la ambigüedad de la tecnología es un punto muy importante de la novela. Cada avance crea necesidades sin las que antes se vivía perfectamente. Hace 20 años no me hubiera podido imaginar lo omnipresente que sería la tecnología de hoy. Para cada uno de los avances de los móviles he pensado que «¿por qué necesito esto?». Pero como todo el mundo he acabado aprovechándolo para cualquier tontería; y esto aunque sé muy bien las huellas electrónicas que dejo y que alguien puede aprovechar.

      • Bendik
        14/05/2017

        Puede ser que tienes rasos Emma y que los jóvenes que están nacido en un mundo con tecnología que no existía en mundo que conocíamos nosotros mas viejos. Que ellos no pueden ver las problemas que hay. Puede ser también que somos demasiados negativas al desarrollo. Por ejemplo, no me gusta el desarrollo de los automóviles que pueden manejar sin conductor. El espacio entre nosotros y el mundo física sera más y más grande.
        Creo que si habia viviendo en el tiempo en el que la gente empezó a utilizar la electricidad, estaba en contra de eso también por el mismo rasos, jaja!

    • Bendik
      14/05/2017

      Me gusta mucho el autor de «La Carretera» y estaba pensando en un otro libro de el tel mismo autor y me pregunto si los historias tienen que tratar de un futuro para ser distopias. El libro (y la pelicula) «No Country For Old Men» también me parece un distopia. Trata de un mundo, en USA, en el que los criminales y la comunidad han convertido más crueles que eran antes. Demasiado cruel para los viejos. Creo que es un distopia pero trata de el USA de ahora mismo.

  5. Daniela
    03/05/2017

    Para ser sincera, la novela no me gustó mucho cuando la empecé a leer. Me parecía demasiado futurista y no soy muy fan de ese tipo de ficción, sino que me gusta más lo clásico. Conforme iba leyendo capítulos, me empezó a gustar más y más. Es verdad que critica la sociedad de hoy en día, pero también critica el futuro que esta sociedad nos dejará con su paso. No estoy a favor del consumismo, ni del capitalismo o la explotación de niños en otros países, niños que trabajan jornadas interminables por salarios minúsculos, pero SÍ que estoy a favor del cambio, de la evolución. Creo que el mundo ha cambiado muchísimo, y creo que eso es algo necesario.
    Debemos adaptarnos a las nuevas tendencias, a las nuevas tecnologías, pero de forma cautelosa, ya que como dice la autora del libro (Ana Alonso) la línea que separa el ‘hacer uso de las tecnologías’, y ‘ser USADOS por las tecnologías’ es muy fina y en algunas ocasiones no somos conscientes de que esto está ocurriendo.
    Podría hablar de la novela Rebelión en la granja (de George Orwell) como un claro ejemplo de distopía, al igual que la obra que estamos tratando ahora.
    En general, la obra me ha parecido bastante completa ya que trata varios temas y no solo la crítica a los problemas de los avances tecnológicos, sino también la crisis existencial que todo joven experimenta en algún punto de sus vidas. A Sara, esto le ocurre un poco desde el principio hasta el final de la novela. La creación de Lynda es un claro ejemplo de esta situación que es tratada en la historia, pero que también existe en la vida real.

    • Marte
      12/05/2017

      Estoy de acuerdo a Daniela, tampoco no gustó la novela de Ana Alonso y Javier Pelegrín cuando empecé a leer. Pero cuando terminó me siente satisfecho y feliz, porque sí ya entiendo la punto. Creo que las novelas escrito para hoy son un poco fuera de proporciones, pero al final si tienen un buen punto de la situación global y política, hoy y para el futuro.

    • Monika
      12/05/2017

      Lo que es importante de recordar es que nosotros no somos usados por la technología, sino por los hombres que la han creado 🙂 El problema no es que avanzamos technologicamente, sino que pensamos del mundo como indivíduos y no como la unidád de género humano.

    • Kristine
      13/05/2017

      Es interesante como la autora mezcla bien lo de ser joven y estos problemas, pero también saca el tema de tecnología demasiada avanzada hasta el punto de destruir en cambio de construir. Porque la verdad es que la tecnología realmente puede ayudar a mucha gente. Aunque la tecnología es una gran parte de los problemas que existen hoy, por ejemplo contaminación y armas, también puedan ser la fuente de cambiarlos.

      • Marte
        13/05/2017

        Estoy de acuerdo que la tecnología hay cualidades negativos y positivos. Oseá hay gente que lo uso «mal» como tú dices Kristine, en armas etc, pero también ayuda a mucha gente de tener un vida mejor. También estoy en acuerdo de ti Kristine de que la autora mezcla bien eso de ser joven y nuestro manera de utilizar la tecnología.

  6. Wiscko
    04/05/2017

    Leyendo Odio el Rosa, me resulta pensar en El corredor del Laberinto de James Dashner. Esta serie de libros empieza con Thomas, que despierte en un ascensor que le transporte al Claro, un espacio abierto cercado por muros gigantescos. Afuera de los muros hay un laberinto que cambia cada noche. Cada semana el ascensor llega con recursos para los chicos que viven en el Claro, y cada mes llegará otro chico, sin memoria de quién es o cómo llegó ahí. En el laberinto hay criaturas monstruosas de carne y máquina que salen solo por la noche, y los chicos intentan sobrevivir en el Claro y correr el labirinto cada día para buscar un éxito y registrar sus movimientos. Al final Thomas encuentra el éxito, y los sobrevivientes salen el laberinto, sólo para encontrarse en un laboratorio y descubrir que la situación fue un experimento de una corporación que se llama CRUEL, Catástrofe Radical: Unidad de Experimentos Letales. Son salvados por un grupo de gente, que les informan que en el mundo había sido un evento apocalíptico, donde los rayos del sol habían matado a millones de gente y chamuscado el suelo. Ahora hay una enfermedad epidémica, y los chicos del Claro fueron puesto a prueba para encontrar un modo de combatir esta enfermedad. Al final, descubren que los salvadores pueden ser otro parte del mismo experimento, y que los del Claro no fueron los únicos puestos a prueba. Así acabe el primer libro en la serie.
    Puedo hacer rasgos de los muros gigantescos a la cúpula del juego en “Los juegos del Hambre” y la sociedad derivada de color, memoria, ambiente o terreno en “El dador” de Lois Lowry. Me parece que para escribir un libro distopía hay que limitar elementos del mundo ficcional, para conseguir inventar nuevos elementos.

    • Marte
      12/05/2017

      El corredor del Laberinto sí es una película muy interesante, y me hace pensar de el miniseries Ascensión, que trata de un grupo de gente que todos creen que están en un astronave. Resultó que toda era un engaño y que sólo eran una parte de un proyecto de investigación, como los jóvenes de El corredor del Laberinto.

  7. Elise
    09/05/2017

    Tengo que admitir que la ficción distópica nunca ha sido mi género preferido y, por lo tanto, no conozco más que las obras más famosas que ya han mencionado mis compañeros. Sin embargo, la que sí me gustaría mencionar es la serie “Black Mirror”. En todos los capítulos de esta serie nos muestra un futuro donde la tecnología se ha apoderado de los humanos. Un buen ejemplo es el episodio, “Men Against Fire”, que se desarrolla en un mundo que se puede caracterizar como post-apocalíptico y distópico. Un grupo de militares tratan de exterminar unas mutantes, “roaches”, parecidos a zombis. El personaje principal mata varios ‘roaches’ y el resto de su pelotón lo celebra y felicita. Lo perturbador es que no se trata de monstros sino gente normal que son víctimas de un genocidio: Los militares llevan un implante neural en su cerebro que hacen parecer monstruos a esas personas para que sea más fácil matarlos. Este implante altera el funcionamiento de los sentidos y los soldados no pueden oler la sangre ni oír los gritos de las personas. Creen que están ayudando a la raza humana manteniendo la sangre limpia sin mutaciones. Al personaje principal se le daña el implante y empieza a ver el mundo y los ‘roaches’ como son de verdad. Tiene la opción de vivir el resto de su vida sabiendo que ha formado parte de un grupo militar que está matando gente inocente o puede dejar que se borren sus últimas memorias reiniciando su chip. Escoge lo último y sigue dentro de la milicia creyendo que está haciendo algo heroico. Eso se puede entender como la reacción opuesta a la de Sara quien, al descubrir que los productos de Sweet Pink alteran el comportamiento de sus consumidores y que usan trabajo de menores, quiere alejarse de la empresa.

    • Mari
      12/05/2017

      No he visto Black Mirror, pero como lo describes me hace pensar en otra película distópica, Blade Runner, de Ridley Scott. Es basada en la novela ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, y toma lugar en un futuro y muy distópica Los Angeles. En este mundo futuro crean robots o ”replicantes” para realizar trabajo muy peligroso en colonías en otras planetas. Parecen mucho a los humanos pero son mucho más fuertes, y no se los dejen vivir con los humanos. El protagonista de la película es un hombre en retiro de la policía que es llamado para una última misión. Tiene que cazar y matar a una banda de replicantes sueltos en la ciudad. En su busca para ellos, el protagonista descubre que tal vez los replicantes son mas humanos que lo que había pensado. La película plantea preguntas sobre qué nos hace humanos y me parece que tal vez eso es lo que también se pregunta en el episodio de Black Mirror que describes, ¿no?

      • Elise
        13/05/2017

        Creo que tienes razón. Lo irónico en el episodio de “Black Mirror” es que la meta de la milicia es optimizar la raza humana haciéndola más fuerte con más agilidad y enfoque, pero al mismo tiempo eliminan los rasgos más importantes para los seres humanos, como la conciencia o la empatía. Me hizo pensar también en la sociedad distópica en la serie “The Walking Dead”. Muchas personas fueron incapaces de matar a los zombis porque no sabían cuánto les quedaba de su humanidad.

    • Silje V.
      14/05/2017

      También he visto Black Mirror y creo que es una serie muy buena y original. Aunque todos los episodios son diferentes historias con diferentes personas, todos tienen el mismo tema. Creo que el episodio «Nosedive» es un buen episodio que tiene algunas similitudes con «Odio el Rosa». Muestra una sociedad donde el estatus social determina su valor y donde lo que está en el exterior importa más que lo que está en el interior.

  8. Ellen
    10/05/2017

    Lo que estas contando sobre la distópia Black Mirror es muy interesante. Lo típico en las novelas que están criticando la sociedad moderna es que las protagonistas son héroes que siempre hacen lo “políticamente correcto”. Como Zara tienen integridad personal y siempre intentan enfrentar a los “malos” que llevan el poder, aunque el riesgo es enorme. En este sentido estas novelas a veces me aburren. Desde el principio sabemos lo que va a pasar. Los héroes van a descubrir cosas que les dan dilemas éticos y luego van a elegir lo “correcto” y batallar casi ellos solos a los malos para salvar la sociedad. La novela Black Mirror es más sorprendente. Es interesante que el protagonista elige lo que no es “correcto”. No he leído la novela, pero parece ser que el protagonista es como un antihéroe y esto me sorprende y me interesa mucho.

    • Elise
      10/05/2017

      No es una novela, es una serie de Netflix, pero me parecía muy interesante y relevante. Por lo mismo que comentas, que las protagonistas siempre toman la decisión correcta sin importar lo que puede implicar para ellos, me sorprendió mucho que este personaje no lo hizo. Puede ser que la intención de los escritores de la serie era enfatizar el hecho de que los humanos son imperfectos y no como máquinas – no aguantan todo y no siempre van a tomar las decisiones ‘correctas.

  9. Siw Helene
    11/05/2017

    la pelicula Divergent, hecha en 2014, es una pelicula distópica. Se trata de una sociedad en donde la gente se dividan en grupos o facciones dependiendo de que tipos de personas son. Toda la sociedad, y como funciona depende de los grupos. A los 16 años los jovenes hacen una Prueba de Aptitud la cual determina a qué facción pertenece cada uno. La protagonista es una divergent, que quiere decir que no encaja en ninguna de los facciones. Es una chica rebelde y trata de cambiar la sociedad en la que vive.
    En Odio el Rosa la sociedad también se divida en pequeñas sociedades o marcas, y la protagonista Sara tampoco siente que la marca en cual termine trabajando le parece muy bien, y no se siente cómoda en su marca. Cómo la protagonista en Divergent Sara también trata de cambiar la sociedad.

    • Lilian Nora Kjos-Pötsch
      11/05/2017

      Yo también he visto esa película y me parecía muy bien. Me gustan mucho esas películas, que nos cuentan como el futuro podría ser y especialmente me gustó la película «Divergent». Como has dicho muy bien la chica es una rebelde y no se puede identificar con el mundo, que el dónde ella vive. Me hace pensar lo mismo que tú dices, que las dos chicas se parecen mucho la una a la otra. Son chicas rebeldes, que no hacen los que se espera de ellas, pero que quieren cambiar el mundo o sea el sistema en el dónde viven. Fue una buena comparación la tuya y tienes buenas pensamientos!

    • Monika
      12/05/2017

      Pienso que las obras como Odio el Rosa y Divergent son un buen ejemplo de la literatura feminista, donde las protagonistas son chicas fuertes, inteligentes y rebeldes. Espero que, gracias a este tipo de literatura, las chicas jóvenes van a entender que sus vidas están en sus manos y pueden luchar conta lo que no les guste.

    • Anna
      14/05/2017

      Es muy interesante lo que “Divergent” muestra. Los grupos tienen calificaciones propias y queridas, y creen que son necesarios para que la sociedad funcione. Pero la sociedad en “Divergent” no funciona en una buena manera, mostrado a través de la protagonista, que es divergente y no pertenece a ningún grupo. Crea una sociedad donde no es aceptado ser diferente de la mayoría, y puede ser una crítica de la sociedad en la que vivimos donde siempre nos ponemos etiquetas.

    • Silje V.
      14/05/2017

      Creo que es interesante ver cómo estas ficciones distópicas como «Divergent» y “Odia el Rosa” son tan populares entre los jóvenes. Ambos tienen muchos similitudes con otras películas como “Los Huegos del Hambre” y “Maze Runner”, que también se basan en una serie de novelas juveniles y son populares en todo el mundo.

    • alejandroaw
      14/05/2017

      Has usado una palabra interesante para describir las actuaciones de la protagonista de «divergente» – rebelde. Esa palabra me da asosiación a la lucha de pobres contra el maltrato de los ricos (gobiernos/compañias). Además funciona una palabra clave para describir de quien son malos y buenos en la historial

  10. Kristine
    11/05/2017

    Hace unos años vi Animal Farm, una película adaptada del libro de George Orwell. Trata más de lo político y las ideologías. En resumen, los animales hacen una revolución, echan a Jones (el granjero) y tomaron el control de la granja. Dicen entre ellos que «todos los animales son iguales».

    La revolución para cambiar a mejor se puede relacionar (con un poco de imaginación) con el intento de Sara. Al final ambos son un fracaso. La revolución y los cambios funcionan bien al principio, pero después los animales ya no son iguales. Napoleón se hace el líder, y los demás tienen que trabajar por él. Como dice Napoleón – «todos los animales son iguales, pero algunos animales son más iguales que otros».

    Sara también intenta cambiar el sistema (aunque en una manera distinta y más discreto), pero al final llega a entender que esto no va a pasar. No hay una solución. En ambas novelas la jerarquía continuará a existir, la gente y los animales no son iguales, y no tienen las mismas posibilidades.

    • Karen Sofie
      12/05/2017

      La película Animal Farm es muy bueno y recuerdo que he visto en la escuela. Me gusta la conexión que has hecho sobre Sara y los animales. Sólo diferencia que estoy pensando es que Sara solo quiere cambiar el mundo y Sweet Pink mientras los animales en Animal Farm son seguidores de una ideología.

      • Lars
        14/05/2017

        Estoy acuerdo. Tal vez, el protagonista en 1984 por George Orwell es más parecido a Sara en ese sentido. En Animal Farm, la “sistema” con el granjero es una analogía al mundo capitalista, mientras la revolución es una analogía a una revolución marxismo/comunismo. El libro procede a mostrarnos que puede suceder dentro del comunismo. Mientras en tanto Odio el Rosa como 1984, el mundo ya está totalitario, y los dos protagonistas quieren, y también piensan que pueden, cambiarlo – aunque la realidad no les permite tan fácil.

    • Veronica G.
      14/05/2017

      Nunca he visto la película «Animal Farm» pero me suena muy interesante, también lo que estás comparando aquí en tu entrada. No creo que podemos quitar las jerarquías que tenemos generalmente en nuestro mundo. Tal vez siempre necesitamos algo/alguien que puede dirigirnos para mantener orden y funcionalidad.

    • Mathilde Engen Hammer
      15/05/2017

      No he visto la película Animal Farm, pero me parece muy interesante. Cuando leído que la película trata de animales que luchan para igualdad entre animales y humanos, pensaba que también podría ser la situación entre humanos también en nuestro mundo; entro los ricos y los pobres. Muchas veces hay demostraciones o luchas para más igualdad entre los ricos y los pobres en el mundo. Es porque nuestro mundo tiene tantos contrastes. Lo mismo pasa en el libro «Odio el rosa» dónde podemos ver la diferencia entra una buena vida y una vida con muchos, muchos dificultades. Y desafortunadamente, como en la realidad, los débiles pierden.

  11. Emma
    12/05/2017

    Tal vez es una casualidad, pero me da la atención que en ambos libros que ha presentado esta portada (Odio el rosa y Juegos del hambre) tienen un personaje principal femenino. Como los compañeros ya han comentado encontramos critica de nuestra sociedad a través de las distopías en estos libros. Creo que los personajes femeninos pueden ser un elemento político también. Sara en Odio el rosa es una chica que tiene mucho coraje, una chica con confianza que se atreve hacer una diferencia. Aparece como Katniss en los juegos del hambre también es una chica valerosa.
    No digo que no es posible tener héroes femeninos en nuestra sociedad. Pero sí creo que desde hace poco tiempo, el que hubiera luchado hacia la distopía hubiera sido un hombre, y todavía podemos mejorarnos de este tema. No sé si tengo razón, pero lo que es definitivamente es que autores que quieren utilizar la literatura para señalar los retos de nuestra sociedad no pueden darnos más de un mensaje, o un “aviso”. Por eso quise comentar que estos autores me hacen pensar en otro reto de nuestro mundo.

    • Karen Sofie
      12/05/2017

      Es muy interesante que has escrito. No pensé nada en eso cuando leí el libro. La directora en Sweet Pink, Juliette, también es una mujer. Ella no es una héroe pero ella es sin embargo uno de los más poderosos en el mundo.

      • Siw Helene
        13/05/2017

        Tienen toda la razón! creo que las películas y novelas han cambiado mucho los últimos años, y señalan que también niñas y mujeres puedan cambiar el mundo. Creo que muchas personas piensan en «heroes» o líderes cómo hombres, y me parece muy bien que muestran los escritores que no necesariamente tiene que ser así

        • Marte
          13/05/2017

          Si, tienen razón! Como Siw dice, también creo que muchas personas piensan en «heróes» o líderes como hombres, pero vemos el mundo hoy podemos ver que esto cambia! Hoy tenemos más mujeres que tienen un papel importante en los negocios, positivos etc y tal vez podemos ver un cambio en los libros también? Que va a ser más normal que los héroes también sean femeninos.

      • Andrea
        13/05/2017

        Estoy totalmente de acuerdo. Las mujeres han tenido muy pocas papeles como héroes en la literatura, pero esto tiene pinta de estar cambiando. Las mujeres siempre han tenido menos importancia en la historia, pero se ve que esto se esta desarrollando (por un camino positivo). Pienso que es muy bien que escritores eligen mujeres como las protagonistas y las que intentan hacer un cambio en la sociedad. Hay aun muchos sitios en el mundo done las mujeres no tienen los mismos derechos y la misma importancia como los hombres. Pienso que la literatura quizás puede enseñar que las mujeres también son capaces de luchar y hacer diferencias en el mundo.

    • Aurora
      14/05/2017

      Sí, yo también pensé en este aspecto de la literatura cuando estaba leyendo el libro. Me acuerdo de una clase que tuvimos con Álvaro, lamentablemente no me acuerdo sobré qué poema/novela era (perdón!), pero nos preguntó de los autores de nuestras obras favoritas, y pareció que todos eran hombres y que la mayoría tenián un hombre como el personaje principal. Parece que hay muchos cambios en nuestra sociedad a lo cual de la igualidad de hombres y mujeres, sino que los mujeres tienen más espacio en la vida cotidiana. Fíjense, por ejemplo, cuantas casas en Blindern que son nombradas de mujeres, y la mayoría de las calles en Oslo son nombradas de mujeres.. Ojalá que el proseco de cambio sigue adelante, tanto en la literatura como en la vida cotidiana

    • alejandroaw
      14/05/2017

      Bueno, me parece super interesante de que tú has decido comentar sobre un personaje principal femenino. Creo que hay varias cosas que decide el género. Los más importante de la decisión depende de a que segmento que quieres vender el libro. Segundo creo que los libros funcionen como un intento a animar chicas y decirles que el género no decide si estás capaz a cambiar el mundo.

  12. Karen Sofie
    12/05/2017

    No he leído muchas novelas distópicas pero yo lo sé que el libro “El señor de las moscas” (Lord of the Flies) es una novela distópica. Es sobre un grupo de chicos que están en una isla. Ellos hicieron un fuego para indicar que necesitan ayuda. Hace un poco tiempo y los chicos no están de acuerdo que es lo más importante hacer para sobrevivir. Por eso se dividieron en dos grupos. Cada día los chicos son más brutales. Algunos de chicos no tienen límites para alcanzar el poder en su grupo.

    En el video sobre distópica hay diferente fotos de una sociedad futura. Eso es como en “Odio el rosa” porque se trata una sociedad en la futuro que es muy moderna y también tiene tecnología increíble. Mi impresión es que en las novelas que tienen lugar en una sociedad futura, como “Odio el rosa”, el autor o la autora quiere expresar que puede ser peligro con la tecnología.

    • Mari
      12/05/2017

      Yo creo que sería posible e interesante comparar ”Odio el Rosa” y ”El Señor de las Moscas” en algunos aspectos. Aunque la protagonista de ”Odio el Rosa” no sea una persona con una mente muy competetiva, hay por supuesto muchas chicas en Sweet Pink que sí lo son. Y también la directora, Juliette, está disponible a hacer cualquier cosa para obtener lo que quiere. Eso aplica por supuesto a los chicos en la isla en ”El Señor de las Moscas”, aunque en una manera quizás más dramática. Podemos tal vez decir que ambientes muy difíciles y duros, por ejemplo algunos mundos distópicos, la ”supervivencia del más apto” es siempre muy relevante.

    • Marte
      12/05/2017

      El señor de las mocas es un novela que ocupa un tema muy importante, la política y régimen de un sociedad. Que un grupo de chicos varados dejar de estar acuerdo en una isla desierta es bastante impresionante, cuando un mundo de adultos hoy está viajando a destruir el mundo en que vivimos. Por comparación con la novela Odia el Rosa, los dos se trata jóvenes que son soluciones orientadas.

    • Veronica G.
      14/05/2017

      Muy interesante lo que dijiste sobre las novelas que tienen lugar en una sociedad futura. Es una posibilidad que los autores quieren expresar las consecuencias que podamos tener por causa de la tecnología en unas décadas. El día de hoy, mucho de lo que hay en nuestro ,undo es muy moderno. Tal vez más «práctico» en algunos casos pero creo que nuestro desarrollo con la tecnología no es solamente bueno.

  13. Mari
    12/05/2017

    Otras novelas que me vienen a la cabeza cuando pienso en las distopías, son ”El Castillo” (”Das Schloss”) y ”El Proceso” (”Der Prozess”) de Franz Kafka.

    En ”El Castillo” el protagonista K. viene a un pueblo que rodea a un castillo, y dice que ha sido llamado allí por el castillo para realizar un trabajo. Los oficiales con los que K. llegue a hablar le dicen que ha habido un malentendido, y que nunca lo han llamado para ningun trabajo. Le hablan sobre un señor Klamm que tiene toda la información que necesita, y un gran parte de la novela se trata del intento de K. a ponerse en contacto con este Klamm. Nunca sabemos que es lo que ha pasado.

    En ”El Proceso” el protagonista Josef K. es detenido por una razón que nunca averigua ni K. ni los lectores. Tiene que atravesar un procedimiento judicial de pesadilla, y defenderse contra algo desconocido, através de una burocracia misteriosa.

    Los libros de Kafka en mis ojos no parecen mucho a ”Odio el Rosa”, pero por lo tanto también describen mundos muy distópicos y difíciles, y tienen definitivamente temas que comparten con la novela de Ana Alonso. Son temas como por ejemplo el individuo versus el sistema y
    la imposibilidad de confrontarse con las autoridades. En ”Odio el Rosa” Sara al final falla en su intento de cambiar el comportamiento de Sweet Pink, y en los libros de Kafka, los protagonistas ni siquiera lleguan a poder comunicar con las autoridades. Los libros de ambos pueden ser vistos como criticas sociales sobre como gobiernan los que tienen el poder.

    Además, ambos ”Odio el Rosa” y ”El Castillo” se tratan de mundos exclusivos e inaccesibles – En Odio el Rosa el mundo es más o menos dividido entro los que están en una marca grande y los que no lo consiguen, y en ”El Castillo” entrar en el castillo es algo totalmente inalcanzable para K. y los habitantes del pueblo. Además, los que están afuera del castillo, o de Sweet Pink, no saben nada sobre lo que hacen allí dentro.

    La alienación y el sentimiento de no pertenecer al mundo en el que se encuentra son otros temas de los libros de Kafka y Alonso. Pero, mientras que Sara en ”Odio el Rosa” tiene a personas con las que hablar verdaderamente (representados por los otros blogueros) a mí me parece que K. y Josef K. Son mucho más disconectados y alienacionados.

    • Jan
      13/05/2017

      Por fin alguien comenta una obra que conozco! Hace años leí «El Proceso», y aunque no me vienen a la memoria tantos detalles, sí me acuerdo del ambiente de angustia y la alienación que mencionas, que Kafka logró plasmar en el libro. Es interesante el paralelo que indicas entre aquello y el sentimiento de perdida de control que provocará una sociedad futurista donde te vigilen por todas partes.

      • Elise
        13/05/2017

        El aspecto de la vigilancia se me hace muy interesante y me hace pensar en el libro “Vigilar y castigar. Nacimiento de la prisión” de Michael Foucault. Lo que dice sobre la disciplina es especialmente relevante para “Odio el Rosa”: La disciplina crea “cuerpos dóciles” que son fáciles a moldear para las instituciones y la sociedad moderna. Para asegurar e interiorizar esa disciplina en los individuos, Foucault propone la idea del panóptico, creado por Jeremy Bentham. Básicamente es una prisión donde una guardia puede ver todos los presos al mismo tiempo, todo el tiempo. Al menos eso es lo que les hacen creer. El punto esencial es que los presos nunca saben cuándo la guardia los vigila y, por lo tanto, tienen que obedecer las reglas todo el tiempo. Es el mismo tipo de vigilancia que vemos en “Odio el Rosa”. Las personas en el Palacio saben que hay microcámaras de vigilancia, software espía en las computadoras y hasta la posibilidad de monitorizar sus reacciones cerebrales.

    • Aurora
      14/05/2017

      Hace muchos años que leí El proceso, y como Jan, me acuerdo de la sensación de ser atrapado sin saber el porqué. Son dos libros muy diferentes, el color rosa no es lo primero que viene a mi cabeza cuando pienso en Kafka, pero tienes razón – sin duda hay paralelos. Parece que hay muchos ejemplos de ese tipo de libro como El proceso que tiene paralelos al mundo de Odio el rosa.

  14. Marte
    12/05/2017

    Delirium es una novela juvenil escrita por Lauren Oliver, publicado en 2011, y el primero de tres libros. La novela se trata de Lena Haloway, una joven en una sociedad en el año 2091, que crían a sus hijos a creer que el amor es una enfermedad. Los habitantes que crecen en esta sociedad todo su vida obtener que saber de ese enfermedad, y que el año que cumple 18 consiguen una cura. Lena está con ganas de consigue esta cura de enfermedad, pero sólo unos pocos meses antes de su cumpleaños, conoces a Alex, un Invalid (una persona que noe recibió la cura y vive en totalmente clandestinidad de su sociedad), y descubre que el mundo no puede ser como creída todo su vida.

    La novela me hace pensar a las otras novelas mencionada arriba, Huegos del hambre, Divergente y Odio el rosa. Todas las novelas tienen algo en común: una joven con una meta de cambiar algo en su sociedad, como régimen o normas. También tienen en común una sociedad serrada, por ejemplo con fracciones o que el mundo fuera de su sociedad está destruido. Pero cómo saben que sus gobiernos son sinceros?

    Las jóvenes todas son del futuro, y también son mujeres. Creo que con estas novelas y películas los autores quieren demostrar un punto actual de hoy. Por ejemplo los regímenes estrictas, reglas y normas de diferentes culturas y religiones y igualdad. Creo que las novelas y películas contiene un mensaje muy importante.

    • Embla
      14/05/2017

      No he leído la novela “Delirium”, pero cuando leí tu descripción de la trama, pensaba que se parece a muchas otras novelas distópicas, como “Los juegos del hambre”, “Odio el rosa” y “Divergente”. Una característica de todas estas novelas es que la sociedad está dividida y que las autoridades son austeras y a menudo no dicen toda la verdad a sus habitantes. En “Odio el rosa”, la marca Sweet Pink y la jefa Juliette tiene mucho poder, y oculta la verdad de como la marca trabaja y manipula a los habitantes. Otra característica de las novelas distópicas es que hay algunas personas que critican a las autoridades, los rebeldes. Ellos se distinguen de los otros habitantes.

  15. Marie Sophie A.
    12/05/2017

    La sociedad en el libro “Odio el rosa” es una forma de dictadura muy especial en el sentido que no es una dictadura basada en fuerza o en violencia, pero en manipulación. Los ciudadanos quieran ser parte de y trabajar para las marcas, aunque son represivas. Este aspecto de la sociedad me parece muy similar a la sociedad en el libro muy conocido de Aldous Huxley, “Un mundo feliz”. Las dos sociedades son sociedades sin guerra, sin mucha violencia, pero con mucha manipulación para adormecer su población. En los dos libros utilizan drogas para cambiar el comportamiento de sus poblaciónes, en “Odio el rosa” para que la gente compra más productos de las marcas y en “Un mundo feliz” para simplemente controlarlos. En los dos casos utilizan estas drogas y sus poder para crear clases sociales.

    • Kristine
      13/05/2017

      Es interesante que la manipulación puede ser igual de malo como el uso de fuerza. Como dices, en Odio El Rosa la marca se lavaban el cerebro a los consumidores para que compraban sus productos, hasta querían trabajar para esa marca represiva. La manipulación del cerebro es un arma en sí mismo, aunque menos obvio, todavía es un arma.

    • Lars
      14/05/2017

      Me interesó también en esa manera de manipulación inusual, que las marcas manipulan la gente para que comprara sus productos y el poder que logran mediante de eso. Es un tipo de distopía capitalista que nunca he oído antes. Aunque – supongo que esto es, de algún modo, exactamente que las marcas hacen hoy en día, en una escala menor, mediante anuncios.

  16. Monika
    12/05/2017

    Para ser sincera, tengo que admitir que la ficción distópica no me gusta mucho. Personalmente quiero creer que nuestro futuro va a ser exitoso y pacífico. A pesar de todo lo que ocurre en el mundo, espero que la realidad presentada en la ficción distópica no sea realmente nuestro futuro. Por eso no leo y no conozco muchas novelas distópicas, pero recuerdo una película que, a pesar de mostrar el futuro de la humanidad bastente negativo, me gustaba mucho. La película se llama Divergente y habla del mundo parecido al mundo de Odio el Rosa. En el mundo de Divergente hay una sociedad dividida por castas inferiores y superiores, donde tu futuro está determinado a través de la inspección de tus genes en el tiempo de tu adolescencia. En Divergente hay también una villana, la mujer que controla todo el mundo, que es mucho más siniestra que Julieta en Odio el Rosa. No le preocupa que la gente sufra y además su ejército mata a los ciudadanos que no se ajustan a sus reglas. La protagonista de Divergente es una chica espacial diferente de los demás que se opone al régimen de la villana. Para no estropear la película, no voy a decir más. Recomiendo que veis la película vosotros mismos.

    • Jan
      13/05/2017

      Comparto tus opiniones tanto del género distópico como de como será nuestro futuro. En cuanto a lo segundo hay un reportaje en el número de hoy 13/5 de Dagens Næringsliv sobre el libro «Homo Deus», escrito por el israelí Yuval Noah Harari. Trata por parte de los desafíos que aportará el aumento de la dominancia de los robots en el mercado laboral en los años que vienen. Está claro que hay el peligro de que demasiada gente quede sin trabajo por ser sustituida por máquinas, pero a vez las maquinas va a necesitar mantenimiento, producción propia y tal, así que, como tú, sigo optimista sobre el futuro!

    • Siw Helene
      13/05/2017

      También estoy pensando en eso de tener poder. Juliette en Odio el Rosa, y también la jefa en Divergente disfrutan su poder y lo utilizan para su propio beneficio sin pensar mucho en las personas a su rededor. Creo que eso tambien lo podemos ver hoy en día en nuestra sociedad, y la verdad es que me da miedo. Hay gente que no deben tener el tipo de poder que tienen, y lo usan sólo para mejorar su propia vida.

      • Marte
        13/05/2017

        Es interesante lo que dices sobre el poder, como ambos Juliette en Odio el Rosa y la jefa en Divergente uso su poder sin pensar mucho en el sociedad donde viven. Es interesante compartir esto con nuestro mundo como Siw dices, y estoy de acuerdo con ella que hay gente en este mundo que tienen mucho poder sin tener buenas intenciones.

        • Andrea
          13/05/2017

          Otra cosa que se puede ver en las dos novelas, es que son personajes que no están de acuerdo de como la sociedad es, y que viven un mundo diferente en su mente. Pretenden ser alguien que no son, y si la sociedad lo descubren les puede ir muy mal- en Divergente hay una posibilidad de que la maten, mientras que en Odio el rosa le pueden echar de Sweet Pink si descubren lo que realmente piensa. Igual que en las dos novelas, vivimos en un mundo donde algunas personas se ven obligados de fingir ser alguien que no son, para no ser juzgados por la sociedad.

    • Lars
      14/05/2017

      Supongo que nosotros todos esperan que el futuro real va a ser mejor que en las distopías, pero yo creo que, por esa razón exacta, la literatura sobre distopías es muy importante. A lo mejor, la literatura distopía pueda crear discusiones y críticas sobre tanto el desarrollo tecnológico como las ideologías políticas.

    • Burim
      15/05/2017

      Tampoco quiero que nuestro futuro va a ser una ficción distópica. Desde mi punto de vista, desafortunadamente, nuestro futuro no, pero el futuro de nuestros hijos va a ser algo parecido como en la novela Odio el Rosa.

  17. Elise
    13/05/2017

    Sé que he sacado ejemplos de la serie “Black Mirror” anteriormente, pero me acordé de un ejemplo escalofriante sobre el uso y abuso de la tecnología. En el episodio “Be Right Back”. Martha, en luto después haber perdido a su novio, Ash, en un accidente automovilístico, se tropieza con un servicio en internet que le permite comunicarse con los difuntos. Basándose en videos e información sobre Ash en el Internet, puede comunicarse con él, o la versión reconstruida de él, mediante mensajes y por celular. Más adelante, esta información se transfiere a un ‘humano artificial’, una especie de avatar que de aspecto físico y voz es igual a Ash. No obstante, la armonía de esta relación bizarra no dura mucho tiempo porque el ‘nuevo Ash’ es demasiado perfecto. Nunca le da la contra, nunca pelea, falta la profundidad de la persona real porque solo está basado en la información subida al internet. Es interesante pensarlo en nuestra sociedad donde todos creen que deben ser tan perfectos, creando nuestros perfiles en Facebook con imágenes tomadas del ángulo perfecto frente al fondo perfecto. La versión incompleta de Ash muestra de una manera muy drástica la importancia de ver la complejidad de una persona, no solamente el ‘lado favorable’. Se relaciona con “Odio el Rosa” donde, según la imagen, la vida de Sara es perfecta y la compañía Sweet Pink es perfecta, mientras la verdad es muy distinta.

  18. Marte
    13/05/2017

    De verdad, la ficción distópica no me gusta mucho y por eso no he leído muchos libros de este tema, tampoco he visto muchas películas sobre el tema. Pero recuerdo un libro que he leído que se llama «Biene lever» o «Abejas viven(?)» que es un libro sobre tres hombres, cada uno cuenta su historia sobre su relación a las abejas. William vive en Inglaterra en el año 1852, Geroge en Estados Unidos en 2007 y Tao en Kina en el año 2098. Tao trabajo en un granja, y su tareas es hacer todo lo que los abejas hubieran antes que se murieron todos.

    Es una historia sobre la importancia de los animales y insectos en nuestro sociedad y que cada uno de nosotros tiene un resposbilidad de cuidar nuestro mundo porque todo tiene su función en el medioambiental. Aún que Odio el Rosa habla de tecnología y no de animales/insectos podemos comparar las dos historia en que todos tenemos un responsabilidad de ser humano y que las dos tiene mensajes importantes de cuidar nuestro sociedad para que no sea un sociedad totalmente individualmente donde solo pensamos en nosotros mismos. Y que la tecnología no es la respuesta de todo, como mis compañeros han dicho, la tecnología puede hacer mucho, pero no puede reemplazar el función del abejas en nuestro naturaleza.

    • Veronica G.
      14/05/2017

      Me gustó tu comparación entre los animales/insectos y la tecnología. Es verdad que la tecnología puede hacer mucho, pero a pesar de esto no podemos existir sin las funciones de nuestra naturaleza. Es muy importante que nosotros cuidemos la naturaleza de nuestro mundo para evitar consecuencias graves.

      • Stina
        14/05/2017

        Varias personas ya han mencionado la serie «Black mirror» que trata del afecto de la tecnología en nuestras vidas y cada episodio muestra un futuro distópico. En el episodio «Hated by the nation» la trama se desarrolla en Londres donde se ha creado un tipo de abeja mecánica para contrarrestar el colapso de la población de abejas. «Colony Collapse Disorder» es un gran problema en muchos lugares hoy, y es posible que tengamos que encontrar otras soluciones para poder polinizar y mantener la flora del mundo. Las abejas mecánicas parecen ser una buena solución en el episodio, pero luego resulta que han sido hackeadas por un hombre odioso que quiere mostrar a la gente una lección. Este hombre programa a las abejas para arrastrarse hacia el centro de dolor del cerebro de la gente, causándoles dolor agonizante. Este hacking de las abejas es al final causando la muerte de casi 400 000 personas.

  19. Tonje F.
    14/05/2017

    Soy entre las personas que no hemos leido mucha literatura distópica, y por lo tanto he tenido que consultar el internet sobre el tema. En vez de comparar con una novela específica, quiero presentar un punto muy interesante que encontré en un artículo del año 2015 (http://www.periskop.no/intet-hap-for-fremtiden/) . Según este, una característica de casi toda la literatura distópica es que se presenta un conflicto donde la comunidad representa una amenaza para la libertad del inidividuo. Lo interesante es que se ha encontrado que las novelas norteamericanas y las escandinavas no se relacionan de la misma manera frente a este conflicto. Las escandinavas en general son mas optimistas en cuanto a las posibilidades de organizar la sociedad. En cambio, las norteamericanas son caracterizadas por una desconfianza en el estado y la sociedad. Como consecuencia, el héroe de una novela norteamericana suele ser un individuo que actúa sólo o por parte de un grupo, en contra del estado y la sociedad. En las escandinavas, la moraleja trata mas bien de las ventajas de contribuir a la comunidad y encontrar soluciones que sirven para más gente. De esta manera, creo que la vista al futuro está muy influida por los ideales de la sociedad en la que fue escrita la novela.
    A mi no me resulta muy claro cómo colocar el mundo de “Odio el rosa” en la comparación de arriba. Es evidente que la libertad de un individuo como Sara/Lynda queda muy limitada, pero Sweet Pink para mi no representa la comunidad. Al contrario, parece que el punto clave es que las empresas grandes, las marcas, ocupan un espacio que debería controlar la comunidad. Es aquí, creo, que se encuentra la crítica de la obra. ¿Alguién opina algo sobre esto?

  20. Bendik
    14/05/2017

    He elejido escribir de una videojuego, Follaut 4.
    El mundo de follaut es un resultado alternativo de la guerra fria en el que la guerra terminó caliente. El mundo ha sido destruido de bombas nucleares y la suciedad ha cambiado a un anarquía total. En el caos hay grupas diferentes que tratan de mejorar la suciedad. Hay un grupo de científicos que tiene el poder más grande. Están observando todo lo que pasa en el mundo exterior y todo lo que hacen la gente. Como hace el Sweet Pink en Odio el Rosa. La gente normal tiene mucho miedo de esos científicos y no pueden encontrarlos o hacerlos daño. Algo muy típica de distopías es que existe un grupo así que tiene el poder, como dictadores, que nadie pude tocar. Como en Los juegos del hambre y en Odio el Rosa.

    Lo interesante es que «the institut» como sellama el grupo de científicos, quieren mejorar al mundo. Eso también es un aspecto típica de distopías también. Que el mundo ha sido formado de un desarrollo que ha acabado ser demasiado grande. Eso puede ser un realidad en nuestro mundo real. La tecnología se desarrollo con un velocidad tan grande que estamos perdiendo el control. Distopías cuentan historias de mundos donde el desarrollo ha terminado en un problema. Son advertencias. Tenemos que parar por un momento y preguntarnos a donde queremos ir. ¿Estamos corriendo en un dirección que podemos soportar o no?

    • Stina
      14/05/2017

      ¡Es muy interesante que eliges un videojuego! No lo pensé antes de leer tu publicación, pero hay un montón de videojuegos que de alguna manera representan un mundo distópico. Por ejemplo Bioshock, Mirror’s Edge, Resident Evil, Half-Life y Portal son algunos de los primeros en los que pienso. Creo que el Hyrule donde despierta Link después de siete años de ser sellado en LoZ Ocarina of Time también puede cualificar como un mundo distópico.

  21. Anna
    14/05/2017

    “Himmelblomsttreet”, escrito por el noruego Gert Nygårdshaug, es una novela que combina la distopía de un futuro horrible y el presente. Describe Europa en un futuro cercano. Está roto, fragmentado y destruido, diferentes grupos están en guerra por causas ideológicas, económicas y por falta de recursos. El protagonista trata de salvar Europa con su gran plan. No es muy relacionado con el tema en “Odio el rosa”, pero sí, habla de un futuro donde el sistema social ha fallado y la sociedad y la humanidad tienen grandes retos. Como “Odio el rosa” habla de la cuestiones del poder de las marcas corporativas, “Himmelblomsttreet” habla del medio ambiente, las explotaciones de recursos naturales y la falta de colaboración. Es una manera de advertir a la sociedad hoy que el futuro, bueno o no bueno, está influenciado por nosotros. ¿Tal vez podemos usar la literatura distopía para crear un futuro totalmente diferente?

    • Idun
      15/05/2017

      No he leído Himmelblomsttreet, pero tengo ganas de leerlo. Me gusta tu pregunta al final, porque la distopía se usa para aumentar conciencia, sobre la sociedad y el medio ambiente etc. Leyendo distopías podemos entender mejor los problemas de hoy y como has dicho quizás crear un futuro diferente.

  22. Lars
    14/05/2017

    Después de que había leído por un rato y me había enterado en la historia y el mundo que describe, enseguida pensé en el libro 1984 por George Orwell. El libro 1984 se trata la historia distopía de un hombre que se llama Winston Smith, que vive en Londres, en una sociedad completamente totalitaria. En el mundo que ha creado Orwell, siempre estás vigilado por “El Gran Hermano” – la personificación del partido que gobierna, mediante tecnología y la policía del pensamiento. La meta del partido es lograr el control de los pensamientos y sentimientos de los ciudadanos. También, se censura la información que les da a los ciudadanos, modificando la historia y fabricando los noticias. En el libro Odio el Rosa afloran muchos de los mismos rasgos que en 1984. El control de las marcas en el libro me recuerda mucho del dominio del partido en 1984, aunque parezcan diferentes en manera ideológica. Mientras 1984, escrito en 1948, era un obvio crítico de las ideologías políticas comunismo y fascismo y lo que pudiera pasar dentro de estos sistemas totalitarias, que había acabado tener un gran papel en los tiempos antes de (y dentro de) la segunda guerra mundial, creo que Odio El Rosa puede ser interpretado como una crítica del capitalismo y la inteligencia artificial; algo que es muy relevante en nuestros tiempos contemporáneos.

  23. Silje V.
    14/05/2017

    No he leído muchos novelas distópicas. Pero he visto la adaptación cinematográfica del novela distópica que se llama “The Children of Men” de P.D. James. Es una película británica-americana, pero el director, Alfonso Cuarón, es mexicano. También ha dirigido otras películas como “Y Tu Mamá También” y “Harry Potter y el prisionero de Azkaban”
    La película fue lanzado en 2006, pero la trama se establece en 2027. Por una razón desconocida, todas las mujeres del mundo son infértiles. Los humanos que ahora están vivos, son la última generación antes de que la humanidad se extinguirá. El mundo está en caos y en muchos países el gobierno se ha derrumbado, lo que ha provocado que muchos refugiados lleguen al Reino Unido, que ahora se ha convertido en una dictadura. Esto se correlaciona con lo que dice el video acerca de un futuro imaginado en el que la humanidad está asediada.
    La sociedad de “Children of Men” es mucho más brutal que la de “Odio el Rosa”. Pero creo que ambos pueden ser vistos como reflexiones de nuestra sociedad hoy. “Odio el Rosa” critica la sociedad capitalista y las marcas, mientras “Children of Men” centra más en las relaciones humanas y las cuestiones ambientales.

    • Mats
      14/05/2017

      Hijos de los Hombres es una película muy buena. También creo que hay temas similares entre este película y Odio el rosa. Por ejemplo hay en los dos obras un grupo de personas que intenta combatir por el derecho y la justicia de los pobres o las clases bajas. Además hay las temas de religion y esperanza en ambas. En Hijos de los Hombres hay solamente una mujer en el mundo que está embarazada, y esta mujer es un símbolo de una esperanza nueva por el futuro.

  24. Andrea
    14/05/2017

    No he leido ni visto muchas novelas o ficciones distópicas. El que recuerdo haber visto, es la película Divergent. Se trata de que la sociedad está dividida en diferentes grupos, y cuando tienes una cierta edad tienes que elegir el grupo al que quieres pertenecer dependiendo de las características que tienes. Lo que pasa, es que algunas personas no pertenecen a un grupo especifico, y la sociedad piensa que estas personas pueden ser una amenaza. Tris es la protagonista, y tiene que esconderse y pretender ser alguien que no es. Esto es lo mismo que pasa con la protagonista de Sweet Pink, donde Sara tiene que pretender ser una de las que le encanta la marca y el mundo donde sólo les importa la ropa y la fama. Pero ni Sara de Sweet Pink ni Tris de Divergent son personas que la sociedad quieren tener en su mundo.

    • Andrea
      14/05/2017

      Quise decir «odio el rosa» y no «Sweet pink»…

    • Embla
      14/05/2017

      También he visto Divergente, y estoy de acuerdo contigo cuando comparas Tris y Sara, porque hay muchas similitudes entre estas protagonistas, y aunque sus mundos son muy diferentes, están en la misma situación. Porque Tris y Sara se distinguen de los otros y, como dices, no son personas que la sociedad quieren tener en su mundo. En Divergente, Tris no pertenece a un grupo específico, porque tiene más características, y por eso es una amenaza a las autoridades – porque no es fácil controlarla. La sociedad es muy controlada y los habitantes no tienen mucha libertad, que también es la situación en Odio el rosa. Y en Odio el rosa, Sara es una amenaza a la jefa Juliette y Sweet Pink, porque conoce los secretos de la marca y se rebele contra Sweet Pink. Todas las personas que los líderes no pueden controlar se representan una amenaza.

  25. Stina
    14/05/2017

    Hace un par de días, empecé mirar una nueva serie de televisión que se llama «El cuento de la criada», basada en una novela del mismo nombre. La trama se desarrolla en un futuro no tan lejano en EE.UU, donde un movimiento fundamentalismo cristiano que se llama «Hijos de Jacob» se instauró un régimen teocrático totalitario tras el asesinato del presidente y la mayoría del Congreso, y la suspensión de la constitución. Ahora EE.UU se conoce como «La república de Gilead».

    Los leyes del régimen se basan en una interpretación estricta y fundamentalista de la Biblia donde las mujeres son propiedad de su marido o su padre. No se las permite votar, tener un trabajo, leer, escribir, tener dinero o propiedades. La libertad de religión no existe y la homosexualidad está estrictamente prohibido. Es una sistema de jerarquía donde ambos hombres y mujeres se clasifican en diferentes categorías según su función social, y su ropa marca de qué categoría pertenecen. Cualquiera persona que no encaja en ninguna de las categorías permitidas, o que no cumple las estrictas leyes del régimen, se consideran «no-humanos», y son ahorcados – exhibido muertos en la calle, o enviados a «las colonias» – un área de toxinas radiactivas, que los «no-humanos» son obligados a limpiar, garantizando una muerte lenta y dolorosa.

    Porque la fertilidad se ha disminuido mucho en este mundo, las mujeres que han demostrado ser fértiles son de gran valor, y pertenecen en una categoría social que se llama «criadas». Criadas son usadas solo por efectos reproductivos y el régimen se las dan a hombres casados de alto rango en la jerarquía que no ha podido embarazar a su propio esposa. La protagonista es una criada que se llama Offred, y vimos todo eso desde su vista. Hay muchos vistos retrospectivos donde vimos como fue su vida antes de esta régimen, como desarrolló la sociedad para hacer posible que los Hijos de Jacob tomaron el control y ganaron el apoyo de muchos de los ciudadanos, y como hicieron a Offred una criada.

    Se sugiere que hay una resistencia secreta llamada «Mayday», y Offred está intentando averiguar quién pertenece a esta resistencia para que pueda unirse con ellos. Pero es muy difícil y peligroso porque cualquiera persona, incluido otras criadas, puede ser espías del régimen.

    Es una sociedad donde las libertades y las posibilidades de los individuos son extremadamente limitadas, todos son controlados y siempre vigilados por las personas con poder, y los ciudadanos son segregados en diferentes clases/categorías. Ana Alonso menciona algunos de estas temas en el video, y aunque la sociedad en El cuento de la criada es muy diferente de la sociedad en Odio el rosa, estos temas aparecen en ambas historias. También en las dos hay gente rebelándose contra la sistema.

    • Mats
      14/05/2017

      También la he visto esta serie, y pienso que tanto «El cuento de la criada» como «Odio el rosa» tratan de lo que Foucault ha llamado «produciendo ciudadanos». Es decir, el gobierno en ambos países intenta a formar ciudadanos que se conformen y obedecen en todo lo que quiere el gobierno. Los que no cumplen serán matado.

  26. Veronica G.
    14/05/2017

    Mientras yo estaba leyendo el libro «Odio el Rosa – Historia de Sara», me acordé de una película distópica que se llama «Battle Royale». Es una película japonesa del género horror/drama que fue creada en el año 2000. Ambas son obras ficcionales y distópicas. Distópicas porque en ambos tramas hay clases dominantes que hacen las cosas y los sacrificios que son necesarios para mantener un sistema ideal. En “Odio el Rosa” el mundo está gobernado por las grandes marcas. Estas marcas manejan todo y los que controlan hacen exámenes para contratar personas adecuadas para formar parte de su sistema. Los habitantes no tienen la libertad para escoger personas, ni tampoco pueden usar los productos que las marcas producen. En el libro, Sara es contratada para representar Sweet Pink, y ella obtiene sus propios productos, y su familia se beneficia a su nueva carrera.
    En «Battle Royale» no son las marcas las que controlan la sociedad sino un gobierno totalitario corrupto. Para mantener una sociedad ordenada y funcional hay el programa que se llama «Battle Royale», igual que la película. El gobierno hace todo lo que quiere con sus habitantes y usa este programa como una competición para restringir la cantidad de crímenes juveniles y violencia. Entonces un grupo de estudiantes son llevados a una isla, y ellos piensan que van en un viaje de estudio. Pero ese no es el caso, ya que están allí para matarse entre sí mismos hasta que quede una sola persona viva, la cual gana la competencia. Volviéndose a extremos como este, extiende el miedo para mantener el control de una sociedad.
    Hay una semejanza entre «Odio el Rosa» y «Battle Royale». Por ejemplo hay un sistema en ambas obras que controla todo con algo que en este caso son las marcas o el programa. También están Sara y un grupo de estudiantes que no quieren hacer lo que el sistema les demanda, pero lo hacen. Sara y los estudiantes tratan de encontrar un escape de una manera u otra. Sara lo hace mentalmente con su blog para mantenerse en contacto con el mundo fuera de Sweet Pink, y los estudiantes a través de suicidios. Ni a Sara ni a los estudiantes les gusta la situación en que se encuentran en su mundo.

    • Mats
      14/05/2017

      No he visto la secuela (Battle Royale II), pero por unas maneras las dos películas tratan de ser rebelde, pero más ser un rebelde sin ser capaz de cambiar nada. Claro, hay diferencias (las personas en BR han sido puesto en una situación afuera de su control), pero al mismo tiempo las protagonistas luchan contra las estructuras en su sociedad sin ser capaz de lograr lo que quieren. Pues, las protagonistas en Battle Royale sobreviven – que es un logro muy importante, pero tienen que seguir huyendo – como Sara pierde su identidad y todo lo que tiene querido.

  27. Embla
    14/05/2017

    Hace unos años leí la novela distópica “Uglies” escrito por Scott Westerfield y publicado en 2005. Trata de un mundo futurístico, 300 años en el futuro. En esto mundo, todos los habitantes reciben una operación (que cambia la apariencia, como una cirugía plástica) cuando se cumplen 16 años, así que todos serán bonitos y con cuerpos perfectos. También, cuando han recibido las operaciones y entonces son “Pretties”, van a vivir en otra ciudad. La protagonista es Tally Youngblood, que está esperando la operación. Pero, Tally se hace amigos con unos chicos que no quieren a recibir la operación y se rebelan contra el régimen. Además, parece que la operación no sólo cambia la apariencia, sino también cambia los pensamientos de la gente.

    Hay muchas similitudes entre “Uglies” y “Odio el rosa”. En ambas novelas las protagonistas se rebelen contra el régimen/la marca, que tiene mucho poder, y las chicas quieren cambiar la sociedad. “Odio el rosa” trata de un mundo de consumo, mientras “Uglies”, trata de un mundo donde la apariencia es lo más importante. Pienso que las dos critican algo de la sociedad hoy, “Odio el rosa” es como una crítica del consumo grande que no es sostenible, y “Uglies” es como una crítica del foco grande de la apariencia en por ejemplo los medios, algo no saludable.

    • Mathilde Engen Hammer
      15/05/2017

      Nunca he leído esta novela pero quiero leerla. ¡Creo que es muy interesante! Puedo entender que penaste en esta novela cuando hablamos del «Odio el rosa» porque también puedo ver los igualdades entre estas historias. Pienso que es muy importante pensar sobre el libertad y los opurtunidades que tenemos hoy, pero también que pensemos en los problemas en la sociedad porque hay muchos. Solamente porque estos universos/mundos en estas historias son peores y más radical, no significa que no tememos problemas hoy. Lo que por ejemplo podemos ver en nuestro mundo es que ya las marcas son muy importante para muchos. También podemos ver que la belleza es muy, muy importante ente todos, también los jóvenes. Es muy mal que aún los niños hasta once años de edad se maquillan hoy, i tienen muchos cosas caras para obtener un estatus más alto entre los otros niños. Sería mejor si podríamos enfatizarnos en la belleza de lo natural!

      • Mathilde Engen Hammer
        15/05/2017

        quise escribir similitudes y no igualdades! 🙂

  28. Mats
    14/05/2017

    Ana Alonso habla sobre la limitad de realización personal de los jóvenes y que lo único que pueden hacer es ser consumidores de las marcas. Esto me da la atención a unas películas, especialmente una de Carpenter que se llama «They Live»(«Están vivos!»). Este película se trata de un hombre (que se llama Nada) que encuentra unas gafas de sol. Cuando se pone las gafas ve un otro mundo – o más específico – él ve la realidad – el real mundo es conquistado de extratetrrestres.

    A través de mensajes subliminales, los extraterrestres han manipulado los humanos a obedecer, consumir y conformarse, así que pueden controlar el mundo sin ruido o problemas. Nada vuelve y encuentra más gafas, y (como en Odio el rosa) se une con un grupo de activistas para combatir los extraterrestres. Aprende que hay un señal que se transmite en el cerebro de la gente, y ellos van para destruirlo.

    Wall-E también trata del consumismo, pero ya que es un película Disney, es bastante optimista, al contrario de They Live o Odio el rosa.

  29. Aurora
    14/05/2017

    Como muchos han mencionado, Odio el Rosa me hizo pensar en los Juegos del hambre, especialmente el aspecto de como es la sociedad en el futuro.

    Una distopía es, según DLE, una «representación ficticia de una sociedad futura de características negativas causantes de la alienación humana.»
    Tanto Odio el Rosa como Los juegos del hambre se trata sobre una sociedad perdida, digamos, y ambos nos da alguna forma de advertencia a lo cual de nuestra manera de vivir.

    Por ejemplo, cuando leí Odio el rosa pensé que la autora nos quería mostrar el «worst case scenario» si no nos cambiemos la mentalidad que tenemos hoy a lo cual del capitalismo y la importancia de la belleza. Es inevitable que la belleza es muy importante en nuestra sociedad – y para mí parece que la autora quería que nos demos cuenta que enfocarse tanto en la belleza es un peligro.

    En el mundo de Los juegos del hambre, la probreza y la injusticia en la sociedad es uno de los temas en la historia. Por ejemplo, es normal que los padres de los distritos pobres venden lotes – es decir, ponen más lotes en la lotería, el sistema les pagan y así tendrán un poco más de dinero. Así las posibilidades que sus hijos sean elegidos se suban. Hay diferencias e injusticias entre los países desarollados e industrilizados, y pienso que tal vez la autora queria exagerarlo – hacer un reality tv en el que niños se matan – para que fijemos un poco de los problemas que tenemos en nuestra sociedad.

    • alejandroaw
      14/05/2017

      Estoy de acuerdo de que la pobreza y la injusticia son dos aspectos que surgen con frecuencia en estos tipos de historias. Creo que eso puede ser un critica indirecta a nuestro sociedad. También nos dice que si no hacemos algo durante esto siglo las differencias solo van a crecer. Ademas parezca que los authores de muchos de estos libros nos dicen que solo si un ser humano decide intentar cambiar el mundo – hay posibilidad.

  30. alejandroaw
    14/05/2017

    Ghost in a Shell es una pelicula de 2017. El mundo que podemos ver es muy distópico. Se trata un futuro bastante cerca del 2017. Un elemento que surge con frecuencia en estos tipos de peliculas y historias es la evolución de la tecnología. En «Odio el Rosa» la gente vuelen con capsulas. Lo que pasa en «Ghost in a Shell» es que la actora principal (Scarlett Johansson) acaba de tener heridas graves. Unos doctores hacen transplantación de su mente a un cuerpo hecho por materiales sinteticos (tiene un cuerpo como un robot – pero la mente tiene posibildad de contrarlo. Lo que me parece interesante de que authores crea estos tipos de universos es la gran cantidad de posibilidades que tenemos. Eso puede crear conflictos o acabarlos.

    • Jan
      15/05/2017

      Leyendo tu recomendación me acuerdo de la película «Ex Machina» de Alex Garland (el mismo autor que escribió «La playa» y que ya se ha hecho director de cine) que vi hace poco. ¡Está muy bien! La rodaron en un hotel de diseño en un fiordo del oeste de Noruega, y va de un señor que logra fabricar robots mujeres con su propio pensamiento y consciencia. El creador las tiene atrapadas, pero empiezan a usar toda su inteligencia y su humanidad en un intento de escapar…

  31. Burim
    15/05/2017

    La novela Odio el Rosa es una novela muy parecida con la novela de Georg Orwell que se llama «1984». Las dos novelas son un sinónimo de la ciencia ficción distópica. La novela de Orwell es una descripción analítica de los regímenes totalitarios, la sociedad es dividida en grupos, lo mismo pasa en nuestra novela, pero con diferentes razones. La novela de Orwell 1984 trata más de una guerra mundial. En el contrario Odio el Rosa trata una guerra comercial. Ambas novelas tratan una sociedad manipulativa y controlada por la elite.
    También en ambas novelas tenemos una revelación contra la elite.
    Esta ficción distópica en el futuro puede ser una realidad, podemos decir que muchas profecías distópicas se han convertido en nuestro tiempo en realidad, o algo parecido.
    Podemos también mencionar las profecías de Nostradamus a las que en su tiempo han sido solamente profecías distópicas, pero hoy sabemos que algunas de sus profecías se han hecho en una realidad.

    • Daniela
      16/05/2017

      Estoy de acuerdo contigo Burim, muchas de las distopías que han sido escritas (hace años y también las más actuales) tratan temas que poco a poco se han ido introduciendo en nuestra sociedad, y lo que empezó siendo una novela basada en lo fantástico, ha acabado convertido en realidad. Muchas de estas novelas distópicas nombradas anteriormente (por lo comentarios que he leído), se basan en la crítica de algún tema social tabú muy poco reconocido por el pópulo, pero que le afecta de forma directa.

  32. Mathilde Engen Hammer
    15/05/2017

    Yo he visto una película que se llama «Equilibrium» publicado en 2002. Esta película trata de una sistema, como hemos visto en los dos novelas «Odio el rosa» y «Los juegos de hambre», dónde la gente tiene que vivir en una manera específica porque los gobernantes han creado esta sistema. En esta película la gente no pueden sentir. No es legal sentir o tener sentimientos sobre nada, y tienes que vivir tu vida sin emociones o sentimientos de algo o alguien. Cada día tienen que tomar drogas para controlar sus sentimientos, y eso es obligatorio. Si los guardes o los gobernantes ven que alguien no toma su droga, o si ven que alguien muestra sentimientos, matan a esta persona.

    Esta película es muy interesante y tiene mucha acción. No voy a decir todo lo que pasa en la película si alguien quiere verla. Pero es muy interesante, y yo creo que es una obra/película distópica.

    No estoy segura si esta película tiene un mensaje claro, o si cada persona tiene que crear su opinion de que el mensaje puede ser; pero yo pienso que esta película quiere decir que los sentimientos y los emociones son muy importantes para equilibrar la gente en una sociedad o un país, y que no es posible vivir una vida sin sentimientos.

  33. Ruth
    15/05/2017

    Conozco a una película distópica que se llama The Road, que está basada de una novela de Cormac Mccarthy. Es una historia muy lúgubre, sobre la vida de un hombre y su hijo en un nuevo mundo. Ocurrió una catástrofe que hizo que el país, o el área en el que viven, está destruido. Ahora es como un nuevo mundo, con varios peligros. No hay comida, y algunas bandas comen otras personas. Por eso el padre se preocupa por su hijo, y quiere protegerlo de esas bandas malas.
    El padre se enfermó y murió, y el niño se va con una nueva familia. No sabemos si son buenos o malos, y es un final abierto. No sabemos qué va a pasar con el niño. A mí no me gusta la película por nada, es muy triste y como que no hay esperanza. No entiendo porque son tan populares las películas y novelas distópicas, cuando son tan oscuras y trágicas.

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Esta entrada fue publicada en 27/04/2017 por en Artes, identidad, realidad, Audiovisual, Ficción, Ficción, Uncategorized y etiquetada con .